Tanda #2 Drift Catalunya & Green Kart. Drift en Can Padró

6 de la mañana del domingo. Tras haber conciliado poco más de 4 horas de sueño el insomnio se apoderó de mi como tiene la costumbre de hacerlo. Hasta las 7.45 de la mañana el despertador no tenía intención de sonar y hasta las 9.00h no podíamos ver drift en Can Padró. Así que teniéndolo todo preparado y ante la negativa de mi cuerpo y mente de dormir nuevamente, procedí a sentarme en el sofá, encender el televisor y coger el mando de mi Play Station.

Las palabras “GT6” aparecían en pantalla antes de mostrar un Nissan Silvia S15 Spec-R, pintado en color Rojo metalizado de Suzuki y con unas Volk RE30 Cromadas. ¿Será el subconsciente? El cuerpo me pedía escuchar altas vueltas y ver humo procedente de las ruedas traseras. Tras poco más de una hora quemando el asfalto del circuito del “Valle de la muerte” la alarma sonó, lo cual quería decir que mi compañero Xavi, estaba a 15 minutos de llegar a casa. Con los bocadillos y bebidas listas, unos cuantos stickers de Fresh Imports en la mochila de la cámara de fotos y muchas ganas, pusimos rumbo a Manresa para ver un poco de drift en Can Padró…

El frío no impidió hacer drift en Can Padró desde última hora.

Llegamos bien preparados, varias capas de ropa en el torso, chaquetas capaces de hacerte sobrevivir en el ártico e incluso yo con dos pares de calcetines. No fue suficiente. Como veis la estampa en el circuito era gélida a más no poder. Algunos decían que la temperatura andaba en 0ºC y no nos extraña, los escapes de los coches rezumaban humo a más no poder, y no precisamente por ningún fallo o fuga en el motor, y el paisaje estaba literalmente congelado.

En el paddock los pilotos preparaban sus coches dejándolos en marcha para que el motor alcanzara la temperatura de trabajo idónea antes de forzarlo en pista. Algunos, como por ejemplo Dani, tenían problemas con sus coches. Él con su Nissan S13 1JZ tenía problemas de sobrecalentamiento en el motor. No había recambios en el circuito, pero el ingenio no faltaba así que se optó por quitar el termostato y que el agua del bloque circulara libremente por todo el circuito de refrigeración constantemente. Esta no era la peor noticia que íbamos a escuchar durante estas tandas de drift en Can Padró y si no lo creeis así, seguir leyendo, os sorprenderéis…

Y hablando de escuchar, el circuito empezó a llenarse de una bruma y de un olor tan característico que incluso los más puristas usarían como perfume, porque es el olor favorito de muchos. ¿Sabéis exactamente nos referimos, no?

Poco después notamos un parón y vimos al todocamino de seguridad poner rumbo a la pista. Recue se salió con su Nissan S14 Death Rocket rompiendo un brazo de dirección. Esta tampoco iba a ser la mala noticia. La mala noticia realmente fue cuando a las 2 vueltas siguientes un piloto desobedeció la bandera amarilla en pista saliéndose en el mismo punto, con la misma trayectoria y con la mala suerte que el césped estaba helado y que la gravilla no paró al mastodóntico BMW E34 que acabó impactando con el S14. El resultado ya podéis verlo…

Pero si una cosa caracteriza el drift es el buen rollo, el compañerismo, el saber ayudar y el prestar recambios cuando son necesarios sin importar nada. El S14 Death Rocket fue reparado en unas dos horas. ¡Que un “pequeño percance” no te impida hacer lo que más te gusta!

Estas tandas de drift en Can Padró fueron bautizadas como Nissan vs. BMW, y así fue. Un “enfrentamiento” digno de ver en persona y os explicaré el porqué: El circuito de Can Padró es un trazado con un asfalto liso espejo, y os lo cuenta alguien que ha entrado a rodar con un coche FWD y de menos de 100 cv, y con el cual tenía una facilidad pasmosa para ir de lado. Imaginaros con un RWD de 150 cv para arriba… Espectáculo asegurado.

Y así fue, humo, motores chillando, “backfires” y muchos petardazos ya sean por el sistema de escape o por los neumáticos diciendo basta.

La suerte tampoco estuvo de parte de Alicia, la única fémina corriendo en esta pista. Su E34 V8 no quería hacer drift en Can Padró. Eso no fue un problema, porque fueron a por el coche de sustitución: El E36 V8 de Llorenç Padró, un gran conocido por muchos en este mundillo. ¡Estamos seguros que disfrutaron a tope!

What do you think?

10 points
Upvote Downvote

Written by Alvaro Arroyo

Comments

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

14 + 19 =

Loading…

0

Ferrari 250 GT SWB. Volver a nacer

H2Oi 2015. Ni un huracán impidió la fiesta